Hace cuatros años se realizó una toma del campus universitario de la UNDAC. La medida fue porque se comprobó que el Comité Electoral había  querido direccionar la elección de las nuevas autoridades universitarias. Prueba de ello se difundió un audio en los medios de comunicación: ahí con cervezas se negociaba los cargos para la universidad.  

En ese proceso se perdió láptops, proyector multimedia y un profesor que era de la agrupación política del Ayni, nos responsabilizó e intimidó no solo a mi persona, también a mis colegas que nos acompañaban. Lo que más me indignó fue cuando este tipo jaló cursos a mis hermanos quienes lo único que hacían era hacer respetar los derechos de los demás. En el fondo nunca hicimos vandalismo, nunca nos llevamos nada(la denuncia sigue su proceso) Varios fuimos jalados por intentar mejorar ciertas debilidades. Hoy varios de mis colegas que lucharon por una buena causa llevarán un año más en la universidad: todo por que un docente les jaló su curso, pese que el conocimiento de esos estudiantes era más que ese abusador.

Han pasado años y las medidas de lucha continuaron en la universidad. Mi mente viene el mes de abril del 2015, donde un grupo de jóvenes cansados del desgobierno que se vivió en la Universidad, salieron a hacer escuchar su voz de protesta. Tras gastar todo el proceso administrativo, los alumnos de la Facultad de Ciencias de la Comunicación tomaron el campus universitario, esta medida se hizo porque en el año 2012 con bombos y platillos se puso la primera piedra para la construcción de una nueva infraestructura, sin embargo todo había quedado en la nada.

Los estudiantes salieron a movilizarse por las calles de Pasco. En sus manos llevaban la piedra que fue puesta hace cuatro años, y esa piedra fue devuelta al ex rector Ricardo Guardían y a las autoridades responsables que nos vendieron humo. Nos mintieron, nos habían dicho que la infraestructura debería haberse culminado hace tiempo. Pero todo había resultado una farsa: ¡Nos habían engañado! No se había avanzado nada.

Saludo a mis colegas que estuvieron liderando la toma: Cristian de la provincia de Junín, Shannen y Bryana de Cerro de Pasco y a todo esos alumnos que salieron a decir si existo, merezco respeto y queremos lo justo. (Percibo hasta la actualidad que aún existan alumnos que solo viven en el conformismo, viven su vida universitaria solo en aprobar el curso cuando en sus narices hay muchísimas situaciones por resolver. ¿Será por eso que la UNDAC está en ranking de universidades a nivel nacional en el puesto número 44?)

Al cerrar los ojos veo los cartones, el piso totalmente frío y una frazada que era compartido entre tres a cinco estudiantes: pocos elementos que cubrieron a mis colegas para pasar la noche. Estaban exponiendo sus vidas a 4380 msnm. Recuerdo las caras cansadas, los ojos rojos y la voz ronca de mis hermanos luchadores. Prueba de lucha de semanas para que las autoridades sean empáticos y tomen medidas inmediatas. Como sabemos fue todo lo contrario. Diálogo y más diálogo…

Me rompe el corazón al recordar a esas madres preocupadas que venían a la toma a ver muy preocupados a sus hijos. “Nosotros pagamos la matrícula, los pagos que nos piden y no es justo que abusen de nuestros hijos” me decía una madre con los ojos llorosos.

Mientras que nuestras autoridades posponían reuniones, veía a mis compañeras que habían renunciado su trabajo para darse de íntegro a la protesta, mientras veíamos a ciertos personales administrativos que no cumplían su función en las responsabilidades que les asignaba el ex rector.

Mientras veíamos que nuestras autoridades esperaron más de tres años para ponerse las pilas e intentar hacer algo, escuchaba la voz gastada y veía la mirada cansada de no poder dormir varias noches de nuestro gran Presidente de Ciencias de la Comunicación: Cristian Luna

Mientras por ahí ciertos trabajadores de la UNDAC se dedicaban a tomar unas copas y jugar una pichanguita, veía a mis amigos cansados organizándose una y otra vez para seguir exigiendo la elaboración del expediente técnico y la construcción de la nueva facultad de Ciencias de la Comunicación.

Mientras cierto profesor de nuestra misma Facultad se ponía a filmar, hablar por el micrófono de su radio (que hacia campaña a sus políticos favoritos) y tomar fotografías para intimidar más adelante como nos hicieron alguna vez. Veo las miradas y la voz motivadora de mis hermanos estudiantes quienes nos decían: sigamos juntos, unidos hasta el final.

Me di cuenta que existen universitarios que valen la pena, me di cuenta que hay alumnos que aman a su Carrera y esta no sea pisoteada por incompetentes (Estoy seguro que serán líderes por excelencia en su profesión).

Conozco a estudiantes que son trascendentes. Quieren lo mejor de su casa de estudios, pero al ponerle piedras, intimidaciones, represalias, la universidad seguirá jodida. Lo bueno es que siempre habrá alumnos como Comunicación y otras facultades que quieren lo mejor de sí. Y eso se debe a la identidad por querer ser los mejores.

La construcción de ambientes para Odontología, la refacción de la infraestructura de Educación, la salida de Luis Aguilar ex miembro del comité electoral quien negoció preferencias con ciertos candidatos, se consiguió con tomas del campus universitario. Ejemplos sobran, solo recordar que hace unos años los estudiantes de la Universidad del Centro del Perú también tomaron el campus universitario y exigían la salida del rector por presuntos actos de corrupción y lograron su propósito. Como alguien dijo “sin lucha no hay victorias” Hoy se necesita estudiantes con decisión, convicción y valientes frente a las irregularidades.

Cabe precisar que si no existen medidas, no hay respuesta. Los alumnos de Comunicación se hicieron sentir, hicieron escuchar su voz y lograron que las autoridades universitarias actúen y tomen acciones.

Hoy el nuevo rector Felipe Yali tiene la pelota en su cancha, si no da seguimiento y luz verde a la construcción de la nueva infraestructura estoy seguro que mis hermanos de Ciencias de la Comunicación tomarán el toro por las astas.